Por: María Miranda Franco
A nivel nacional ya se puso en la palestra una nueva iniciativa sobre la neurodiversidad, esta ley plantea la protección de las personas que piensan de forma diferente y que engloba a las personas que están dentro del Trastorno del Espectro Autista (TEA), Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), Dislexia, entre otros; quien la presentó fue el diputado federal, Salvador Caro Cabrera, el pasado 9 de marzo.
Al respecto, fue entrevistado por Metropolitano, Nefi Campos Muñoz, presidente del Club Rotario Pro Salud Mental, quien celebró este esfuerzo que se está haciendo a nivel nacional y que busca eliminar la palabra ‘discapacidad’ a estos diagnósticos, pero no sólo en el discurso, sino a través de herramientas para una verdadera inclusión en la escuela y en la vida cotidiana de las personas neurodivergentes.
“Esperamos que el próximo año se puedan ver ya algunos avances, algunos foros nacionales; es toda una transición, es casi como el tema de la discriminación de la homosexualidad, por ejemplo, de cambiar la visión de millones de habitantes con respecto al autismo, que durante muchos años ha sido considerado una enfermedad o discapacidad, y decirles -fíjate que nos equivocamos todos estos años y resulta que solamente es una forma diferente de ser y de comunicar-. Es un estigma muy fuerte”.
En el mundo se estima que 1 de cada 160 niños o niñas tienen esta condición, pero en Aguascalientes se tienen estudios, indicó el neuropsicólogo clínico, que afirman que es 1 de cada 115 infantes.
“Tenemos una mayor incidencia, sí hay un mayor aumento de estas neurodivergencias y pudiéramos pensar que está mal, que es fuerte este problema de discapacidad, pero, primero no es una discapacidad; segundo, nos exige una demanda, porque hay niños con estas neurodivergencias, para generar modelos, si tenemos más niños urgen más espacios, ¿no? Y crear condiciones para que ellos puedan desarrollarse como debe de ser y tener un espacio de funcionalidad”.
Finalmente, el especialista, en el marco del Día Mundial de Concienciación del Autismo, indicó que los tres grados en que se divide el TEA son neurodivergencias y no tendrían que ser atendidas en escuelas como los Centros de Atención Múltiple (CAM), pues lo que se busca es que ese niño o niña que en la actualidad es valorado como TEA 3, pase a ser 2 y con ello requiera un menor apoyo en su vida cotidiana. Aunque no se debe dejar pasar que el autismo en muchas ocasiones viene acompañado de otras comorbilidades.
“Los 3 grados son neurodivergencias. Claro que algunos grados están más diversos que los otros, o sea, el de nivel 3 tiende a tener una mayor disfuncionalidad en base a lo normativo, a lo esperado porque su forma de comunicar es muchísimo más compleja, son menos entendidos o más estigmatizados; en fin, lo que esperamos es que si desarrollamos estrategias, precisamente de una intervención de un nivel 3 pueda bajar a un nivel 2 y de un nivel 2 a un nivel 1, en donde haya una mayor funcionalidad social y que se puedan aprovechar más sus oportunidades”, concluyó.