Con el argumento de que “enseñaba mucho” en las fotos de sus redes sociales, Conrado Salazar fue despedido de su cargo como director de una primaria en Manzanillo, Colima.
Tras esto, las madres de familia armaron la grande, se manifestaron y reunieron firmas para exigir su restitución.
Las exigencias de las madres de familia fueron escuchadas y el joven ya regresó a su empleo.